El Poder Ejecutivo remitió al Parlamento un proyecto de Ley, con artículo único, donde establece que el Estado asumirá el control y la regulación de la importación, producción, adquisición, comercialización y distribución de marihuana. Su objeto es “arrebatar al narcotráfico un negocio de entre 30 y 40 millones de dólares anuales”, argumentó Presidencia.